Es uno de los símbolos de la ciudad y también la causa directa de su existencia. Fue construido polos romanos para salvar el lecho del río Lérez en una de sus principales rotas de comunicación terrestre: la vía XIX.
El puente se mantuvo en pie hasta mediados del siglo XII, aunque en tan mal estado que fue necesario hacer uno nuevo a su lado. Pero cuando esto sucedió ya había servido para bautizar el núcleo de población que estaba formándose, el burgo de “Ponte Veteri”, en clara alusión a su decrepitud.
Formada por once arcos rebajados de medio punto, está realizada en silleria medieval muy modificada por ampliaciones posteriores. Hoy es paso obligado del Camino Portugués de peregrinación a Santiago, que segue en buena parte lo trazado de la vía romana XIX.
Fuente: visit-pontevedra.com